Me uno a la indignación que expresa Katia D’Artigues en su blog del periodico El Universal, es para irse de espaldas cuando se lee tremendas atrocidades que cometen “nuestros representantes” con el presupuesto destinado a las personas con Discapacidad.
Lejos de favorecer la inclusión de este cada vez más amplio sector de la población para que puedan hacer las actividades que la mayoría de las personas hacen se les cierran más las posibilidades de una vida digna con derecho a la educación, salud y trabajo. Muero de la rabia cuando leo los porcentajes a reducir para el año 2010. ¿Es que acaso no se dan cuenta que son personas que tambien sienten y piensan como ellos (mucho mejor diría yo)?! ¿O lo piensan y poco les importa??!!