A lo largo de mi vida he tenido la fortuna de tener muy buenos maestros, pero desde que nació Benjamín puedo decir que la presencia de los maestros ha sido indispensable, y no todos tienen el título de “licenciado(a) en educación”, pero todos ellos han sido muy buenos maestros tanto para Benjamín como para nosotros como padres.
Hemos contado con la presencia de estimuladoras, maestras de educación especial, fisiatras, psicologas, médicos, auxiliares, logopedas, y otros papás que con su experiencia nos han dejado una enseñanza.
