Hoy Benjamín cumple 7 años y me parece increíble que ese pequeñito que no pude tener entre mis brazos inmediatamente, esté hoy tan grande,a punto de irse a la primaria.
Mi bebé ya no lo es tanto, ahora es un niño grande que recién cumplió los 4 años el día de ayer! y yo sigo con esos sentimientos encontrados de el corazón que sigue viéndolo tan pequeño, tan frágil, tan indenfenso como el día que nació; pero por otro lado mi razón me dice que ya es un niño grande, que tengo que dejarlo crecer, que inevitablemente se caerá pero yo estaré a su lado tendiéndole la mano para ayudarlo a levantarse.
Parece que fué ayer… lo recuerdo todo tan claro, y como me arrepiento por las lágrimas que derramé con tu llegada, pero tú sabes que era por el temor a lo desconocido y nunca por no amarte, ahora, cuando veo hacia atrás agradezco por tu llegada y solo pido a Dios que me permita verte crecer y guiarte lo mejor posible, en estos 3 años cambiaste mi vida por completo y quiero aclararte que no siempre los cambios son malos. Me hiciste una mejor persona, cambiaste mi forma de ver la vida, me enseñaste a ser más paciente y tolerante aún cuando en ocasiones he sentido que algunas situaciones me rebasan.