Hace tiempo (y aún ahora) muchos médicos al dar la noticia del nacimiento de un pequeñito con síndrome de Down a los padres también aseguraban que no sobreviviría por mucho tiempo, aseguraban que su esperanza de vida era de máximo 5 años y con esto desalentaban a los padres para iniciar la atención temprana de su hijo. Con el paso del tiempo se han ido dando cuenta de que esto no era cierto, lograban sobrevivir más tiempo y ahora que se les brinda la atención adecuada la esperanza de vida ha aumentado hasta alcanzar los 60 años!, pero el vivir más no siempre va de la mano con la calidad de vida, así que por eso debemos de informarnos y de compartir toda información que llegue a nuestras manos para asegurarles una vida larga y con atención adecuada a todas las personas con síndrome de Down, porque se merecen una vida digna!.
Esperanza de vida y síndrome de Down
Pablo Pineda
Los retos que tenemos por delante; Pablo Pineda es una persona que ha luchado mucho y ha logrado mucho, pero aún quedan muchas cosas por conseguir, seguimos en la lucha constante día a día!
Los hermanos y el síndrome de Down
Para un hijo con síndrome de Down no hay un cómplice mejor que su hermano, pero realmente cuando tenemos un hijo con SD nos ocupamos de el otro hijo? o en caso de ser el primero el que tiene SD tenemos otro para acompañarlo o porque realmente queremos otro hijo? 
Hijos de personas con síndrome de Down
A la mayoría nos ha pasado por la cabeza más de una vez la idea de que nuestros hijos con síndrome de Down no podrán tener hijos cuando sean adultos, algunos porque no podrán físicamente, otros porque quizá no quieran tenerlos y otros porque se les convencerá de no hacerlo.
Relaciones amorosas y síndrome de Down
Lejos de lo que la mayoría de las personas cree, que las personas con síndrome de Down serán eternamente niños, son personas que crecen física, intelectual y emocionalmente, son capaces de enamorarse, de desilusionarse por un amor mal correspondido, de llevar a flote una relación amorosa e incluso de llegar al matrimonio.
Trabajo y síndrome de Down
Al principio me preocupaba mucho el futuro de Benjamín, pensaba que quizá nunca podría tener un trabajo cuando llegara a ser un adulto, sé que aún falta mucho para que llegue a esa edad y también falta mucho para que las empresas abran sus puertas para que personas con síndrome de Down puedan trabajar en ellas, pero me alegra enormemente cuando sé de alguna empresa que ya está dando el primer paso para la contratación de adultos con síndrome de Down porque sé que para cuando el mío llegue a ser uno de ellos tendrá un poco más de oportunidades.
Deportes y síndrome de Down
Ante la ignorancia de las capacidades de las personas con síndrome de Down, muchos tienen la idea érronea de que simplemente son personitas que siempre serán niños capaces de dar mucho amor pero incapaces de realizar muchas otras otras cosas que el resto de la población sí hace, como los deportes.
