Cuantas veces pensamos en la importancia de la educación de nuestros hijos, mil formas diferentes para que su conducta sea apropiada, muchos consejos de quienes han pasado o están pasando por una situación similar y ciertos métodos les han funcionado, nos esforzamos tanto cada día luchando.
Luchando en primer lugar para que nuestros hijos sean educados tanto en las habilidades sociales como educativas; ayudándolos a abrirse puertas y a romper mitos, a informar a la sociedad para que sepan que su existencia no es mala, no es un error, Dios nunca se equivoca y ellos vienen a corroborar con su presencia que el amor existe.
Pero a veces es tan triste que sin importar el nivel socioeconomico, cultural o educativo de una persona, esta pueda tener tan poca sensibilidad y tacto al referirse a un niño con SD con palabras que pueden herir los sentimientos de una madre.
Y muchas veces no es la ignorancia o falta de tacto lo que le hace a uno cuestionarse la inteligencia del otro ser humano, sino la poca capacidad de abrirse ante el conocimiento que uno intenta proporcionarle acerca de la experiencia propia y de la bendición que es tener a un hijo con SD en casa.
Nosotros no hemos pasado por esto, hemos tenido algunas otras experiencias poco agradables pero diferentes, pero conozco a personas que desafortunadamente se han topado de frente con este tipo de personas tan desagradables que lo único que se me viene a la mente es decirles Animo! Dios nunca se equivoca y si nos ha permitido tener un hijo con SD en casa es porque tenemos la fortaleza y el orgullo para sacarlo adelante, poco a poco trabajando todos juntos iremos creando una sociedad con conciencia, un futuro mejor para nuestros hijos!
así es, aunque no creo que Dios nos escoga porque tengamos lo necesario sino nos va transformando (si nos dejamos) para tener lo necesario para ser padres de ellos
saludos!
Como mencionan arriba la página no se porque les llaman Sindrome de Down porque deberíamos llamarlos Sindrome del Amor porque es lo que son ellos, todo amor.