Síndrome de Down

Otras formas económicas de estimular la motricidad fina en los niños por medio de el juego con materiales fáciles de conseguir y de colores llamativos para ellos.

Con un cestito o cualquier otro recipiente con agujeros podemos seguir reforzando la pinza fina. Con limpiapipas de colores llamativos pedimos al niño que vaya pasándolos por cada agujerito.

Con un bote de yogurt (hacerle un agujero en la tapa) o con un porta cepillos, introducir de uno en uno los pompones. Podemos aprovechar también para ir discriminando por colores o para ir contando, de esta forma reforzamos varios conocimientos a la vez.

Y para ir probando diferentes texturas también podemos hacer el mismo ejercicio de los pompones pero ahora con canicas.

Por último,  con fichas plásticas o botones pegados a un elástico/resorte y unos cuantos cuadros que podemos recortar de foamy, tela o cualquier otro material flexible; ayudamos al niño a pasar el botón por una ranura previamente hecha al centro del cuadro. Al principio procurar que sea lo suficientemente grande para no frustrar al niño y poco a poco ir cortando mas cuadros con la ranura mas pequeña para ir afinando esta habilidad.